¿Te gustaría saber cuándo activar o detener el riego?
No hay muchas soluciones para despedirse del estrés hídrico y de los riegos innecesarios, sencillamente hay que controlar el riego.
Se empieza encontrando una buena herramienta.
Algunas personas prefieren los tensiómetros, y otras, las sondas capacitivas.
En este artículo, vamos a explicar cómo funciona una sonda capacitiva y cómo puedes utilizarla para impulsar el rendimiento del riego.
Las sondas capacitivas se instalan lo más cerca posible de las raíces para medir el contenido hídrico en volumen (%) y la temperatura (°C) a varios niveles de profundidad. Es una herramienta excelente para controlar el riego.
Por simplificar, podemos decir que el suelo está compuesto de partículas y de poros:
Los poros se componen de dos partes:
- aire;
- líquido, principalmente agua.
El contenido hídrico es la parte representada por ese líquido en una muestra de suelo. Esta evoluciona durante el año en función de las precipitaciones y del suministro de agua.
Distinguimos entre contenido hídrico ponderal
Contenido hídrico ponderal = masa de los líquidos (g) / masa seca (g)
…y contenido hídrico en volumen
Contenido hídrico en volumen = volumen de agua (cm³) / volumen total del suelo (cm³)
Las sondas capacitivas miden precisamente este valor.
El resultado se expresa en porcentaje
- Cuando la sonda está en el agua, el contenido hídrico en volumen es del 100 %.
- Cuando está al aire libre, el contenido hídrico en volumen es del 0 %.
¿Cómo miden las sondas capacitivas este parámetro?
Las sondas capacitivas miden un rango de frecuencias («scale frequency» en inglés). Este valor se obtiene midiendo la permitividad dieléctrica del suelo (ε).
En concreto, las sondas desplegan un campo electromagnético alrededor de sus sensores.
Los componentes del suelo (partículas minerales y orgánicas, agua, aire, etc.) afectan en mayor o menor medida dicho campo electromagnético.
Por ejemplo, el aire afecta muy poco al campo, mientras que el agua le afecta mucho.
Al medir las perturbaciones del campo electromagnético, la sonda capacitiva es capaz de determinar el rango de frecuencias.
Este dato bruto, una vez que se recalibra en ecuaciones, se convierte en interpretable agronómicamente.
El tipo de suelo influye en los resultados de la sonda capacitiva. Como los componentes minerales y la porosidad de los suelos son diferentes, la sonda capacitiva reacciona de manera distinta de un suelo a otro.
Por ello, es necesario aplicar una ecuación de calibración específicamente adaptada a un tipo de suelo determinado para transformar el rango de frecuencias en un dato de contenido hídrico en volumen.
El fabricante suele proporcionar esas ecuaciones
Por ello, bastaría con indicar el tipo de suelo para calibrar automáticamente la sonda. Entonces esta podrá calcular el contenido hídrico en volumen en tiempo real.
✔ La sonda capacitiva es la solución ideal para obtener más información sobre la circulación del agua en el suelo.
✔ En una misma sonda, hay varios sensores, a intervalos de 10 cm, lo que permite visualizar el conjunto del perfil de las raíces con una única sonda.
✔ No es necesario cebarla al instalarla ni sufre desviaciones con el tiempo, por lo que la sonda está operativa de manera inmediata y las mediciones son fiables a largo plazo.
✔ Podrás controlar fácilmente el arraigo eficiente de las plantas por horizontes de extracción y su evolución en el tiempo.
✔ Con los resultados que mide, se puede determinar con precisión la capacidad del terreno y la parte inferior de la reserva de agua fácilmente utilizable.
✔ Con las medidas se observa la porosidad o la compactación del suelo por horizontes y, en su caso, se pueden diagnosticar problemas agronómicos (apelmazamiento, alio, etc.).
❌ Para elegir la ecuación de calibración adecuada, es necesario conocer bien el tipo de suelo.
❌ El dato que se obtiene es el contenido hídrico en volumen, pero no indica si el agua presente en el suelo está disponible para la planta o no.
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